Esto me recuerda a mi padre, que de joven trabajaba en el campo cuando aún no estaba mecanizado.
Viendo el otro día cómo recogían cebollas con un artilugio dijo: "Cagüen la leche, ya ni se agachan para trabajar en el campo. Con lo que yo he pringao..."

Al menos así la gente no tendrá excusa para no ducharse ("ay, no puedo sino lavarme, porque se me moja la escayola").

A saber la de tiempo que pasa hasta que se aplique esto...