¿Y qué esperabais? Esa gente vive en una guerra ideológica contra el mundo y la esencia natural del ser humano. En cuanto tienen una mínima cota de poder se dedican a censurar y oprimir a todo lo que tienen por debajo.

Y no son lgtbqabcchdefghijklllmnñopqrstuvwxyz, son maricones.

Cada nueva secta es más radical que la anterior, y los que son desplazados se vuelven ultraconservadores. Pasó con los judíos, pasó con los cristianos y ahora pasa con los gays.